CELEBRAR LO QUE VAMOS VIVIENDO, EN LA MESA COMÚN. Sábado 18/01/2025. Prepara Atarazana.

 Canto Bienvenido a tu casa

 

LA HUMANIDAD QUE PERDEMOS EN PALESTINA

Lo peor que hizo el nazismo, más allá de la atrocidad de aniquilar a millones de seres humanos por sus creencias y diferencias, más allá de todo el sufrimiento causado, fue abrir la puerta a la justificación definitiva de aquellos que creen que existe un grupo de personas, un pueblo, que es superior a los demás, que fueron elegidos por Dios mismo y que tienen, por tanto, más derecho que el resto de la Humanidad. No solo más derecho que los palestinos, sino que el resto de la Humanidad. No solo tienen derecho a una tierra que Dios mismo les prometió y les dio, sino que tienen derecho a actuar por encima del resto de la Humanidad, porque son superiores. Tienen derecho a despreciar, ocupar, expulsar, amedrentar, secuestrar, torturar, asesinar, destruir, aniquilar a otros seres humanos, porque ellos son mejores. Es el principio del supremacismo, y por eso son apoyados por el resto de supremacistas del mundo que se consideran también elegidos, mejores que el resto de la Humanidad. El genocidio de Palestina es un retroceso de décadas en nuestra Humanidad, en el consenso de que todos somos iguales en dignidad y derechos por el simple hecho de haber nacido seres humanos. El genocidio de los palestinos lo pagamos todos con nuestra Humanidad, como también lo pagamos con el nazismo. Entonces teóricamente aprendimos algo. Hoy quizás solo perdamos.

José Mª Martín Civantos

 El año 2024 reventó los registros: fue el más cálido de la historia y el primero en superar el límite de 1,5 grados. eldiario.es

El servicio de vigilancia climática Copernicus lo anunció en verano y las previsiones se han cumplido escrupulosamente: el año 2024 que acabamos de dejar atrás ha sido el más cálido en el planeta desde que hay registros y el primer año natural en que la temperatura media ha superado en 1,5 °C el nivel anterior a la revolución industrial. 

Aunque esto no significa que se haya rebasado el límite fijado por el Acuerdo de París —que alude a las anomalías de temperatura promediadas durante al menos 20 años—, pone de manifiesto que las temperaturas globales están aumentando más allá de lo que los humanos modernos han experimentado nunca. 

Pero no es la única mala noticia. Todos los indicadores registrados en un esfuerzo conjunto por el Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio (CEPMPM), la NASA, la NOAA, la Oficina Meteorológica del Reino Unido, Berkeley Earth y la Organización Meteorológica Mundial (OMM) rompen los récords anteriores en una escalada que amenaza la vida humana en el planeta.

 

Volverán

Volverán. Mientras discutimos, volverán. Mientras miramos nuestro ombligo, volverán. Mientras defendemos la pureza, volverán. Mientras deshacemos lo andado, volverán. Mientras tanto… volverán. Porque ellos son el poder y nosotros solo la palabra. Volverán para arrasarlo todo. Volverán para aplastar. Volverán, porque nunca se han ido. Volverán y nos cogerán desprevenidos. Volverán, porque hemos perdido la Utopía. Volverán, porque no somos alegría. Volverán, porque no supimos contagiar la esperanza. Volverán, aunque no queramos. Volverán, si no despertamos. Volverán. 

José Mª Martín Civantos

 JUAN 2, 1-11 Bodas de Caná...

Canto:  Yo vengo a ofrecer mi corazón

Ofertorio: Compartiendo nuestras luchas por Otro mundo posible: La Paz en Palestina, Dignidad y derechos para las personas sin hogar en Granada.

Plegaria: El dios de la VIDA Y EL AMOR: 

“Dios se manifiesta en todos los acontecimientos que nos invitan a vivir. Dios no quiere que renunciemos a nada de lo que es verdaderamente humano. Dios quiere que vivamos lo divino en lo que es cotidiano y normal. La idea del sufrimiento y la renuncia como exigencia divina es antievangélica. El mensaje para nosotros hoy es muy simple, pero demoledor. Ni ritos ni abluciones pueden purificar al ser humano. Solo cuando saboree el vino-amor, quedará todo él limpio y purificado. Cuando descubramos a Dios dentro de nosotros, seremos capaces de vivir la inmensa alegría que nace de la unidad-amor. Que nadie te engañe. El mejor vino está sin escanciar, está escondido en dentro de ti”. 

Pero lo mejor, sin duda, es compartirlo, como el pan, símbolo del trabajo y el sustento. Compartir, repartirse, para construir nuevas formas de relación y un nuevo mundo, para construir la felicidad y acabar con la incertidumbre que nos apesadumbra. 

Por eso hoy recordamos a Jesús en la última cena, con sus discípulos. "Quienes comemos tu pan y bebemos tu vino, compartimos tu vida y tu proyecto".