miércoles, 3 de febrero de 2016

La marihuana como síntoma.



Miembr@s de CCP de Granada empujan en la transformación y luchas de estos barrios Granadinos ignorados por las administraciones y este sistema injusto e inhumano. Lo hacemos participando en la Plataforma Ciudadana de la Zona Norte (PCZN), en la Asociación pro derechos humanos (APDH), Fondo de Solidadidad, Economías Alternativas: FIARE, ASPA, Mayores en Norte,  Consumo responsable, Banco de alimentos...

Es importante destacar como en las movilizaciones que describe este artículo son much@s l@s cristian@s de base que impulsan estas acciones: Cristian@s de base, CCP, párrocos de las parroquias de Norte, HOAC, religiosas en barrios, además de las personas de diversa índole y condición ciudadana. 

REPRODUCIMOS ESTE ARTÍCULO COMO MUESTRA DE RIGUROSA DISECCIÓN DE LO QUE OCURRE EN LOS BARRIOS IGNORADOS. ZONA NORTE DE GRANADA.

La marihuana como síntoma
La confesión de Endesa de su incapacidad técnica para prestar servicio a sus clientes en la zona Norte vuelve a poner de actualidad el cultivo intensivo de marihuana en viviendas sociales. Pero en Norte la marihuana es sólo un síntoma de una enfermedad estructural y sistémica.
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El “ya no puedo más” de José Luis Pérez Mañas, director de la división para Andalucía Oriental de Endesa, ha acaparado en la última semana los titulares de los medios. El directivo de la compañía eléctrica apuntaba en sus declaraciones hacia el cultivo intensivo de marihuana en viviendas de determinadas zonas del distrito como la causa de los continuos cortes de luz que sufren y denuncian los vecinos.
La confesión de impotencia técnica de Endesa para dar servicio en condiciones a sus clientes en barrios como Cartuja, Rey Badis o La Paz no es nueva. Hace dos años, cuandosaltó la alerta con los problemas eléctricos en colegios y guarderías del distrito, Pérez Mañas dijo lo mismo a las administraciones y, asegura, “les pidió que hicieran algo”.
La presión vecinal hizo que unos y otros se sentaran a la misma mesa y hablaran de soluciones y de acciones coordinadas. Se habló de cumbre energética. Poco antes de las Navidades de 2014, un enorme dispositivo policial desmanteló en Molino Nuevo un buen puñado de invernaderos levantados en los trasteros de los bloques de viviendas sociales… Los mismos donde seis meses antes se había desmantelado “el mayor invernadero de Granada”.
Es como un ritual o bucle continuo: los vecinos se desesperan y protestan por los cortes de luz, sobre todo en invierno. Endesa dice que no puede hacer más y apunta hacia el cultivo de marihuana. Las administraciones se reúnen y dicen que van a colaborar. Hay un gran operativo policial, seguido de otros puntuales… Y otra vez vuelta a empezar.
Hoy mismo la compañía ha cortado unas 30 acometidas eléctricas ilegales en el distrito para intentar paliar la crisis energética de este invierno. Pero el problema de Endesa y de la Policía Nacional son los tiempos. “La Justicia tarda unos cuatros meses en autorizar una intervención y tras el corte de una acometida ellos tardan cuatro horas en restaurarla”, aseguran fuentes de Endesa.
“Ellos” no son los vecinos de la zona Norte, quienes han tenido que ver en titulares que los llaman ladrones. “Ellos” son cuatro o cinco familias que controlan el distrito y que no son, ni mucho menos, el 90% de la población de Cartuja, Rey Badis y La Paz, los tres barrios más golpeados por la crisis energética. “Ellos” tienen “los mejores abogados y los mejores electricistas”… Tienen, además, Corvett, Lamborghini y otros coches de alta gama… Pero viven en pisos sociales propiedad de la Junta de Andalucía. Se han adueñado de gran parte de un parque público de viviendas con total impunidad y comercian con esos pisos, decidiendo quién vive en ellos (casi siempre las ‘niñeras’ de los cultivos).
En un distrito donde la mayoría de la población activa no tiene empleo y las tasas deanalfabetismo y fracaso escolar son tan elevados, la marihuana tiene su mejor caldo de cultivo.
La Fiscalía, a raíz de las informaciones publicadas en los medios estos días, ha anunciado que va a actuar de oficio. Pero en Norte, si de verdad se quiere ir al meollo del problema, no basta con quedarse en el folclore de la ‘maría’ y habrá que preguntarse, como han hecho los vecinos concentrados hoy en la Plaza del Carmen y frente a Endesa, qué intereses tienen las administraciones y las empresas para, por acción u omisión, desentenderse de los problemas estructurales del distrito.
Y ya de paso, estaría bien saber en qué terminó la petición de la Junta de Andalucía a la Justicia cuando cogobernaba PSOE con Izquierda Unida, para que las ocupaciones de las viviendas sociales de Norte se investigaran como “crimen organizado”.
Como le gusta decir a Pérez Mañas, el directivo de Endesa, en la Zona Norte de la ciudad de Granada “la marihuana es sólo un síntoma”. Habrá que ver si de verdad las administraciones y la Justicia quieren ir a las causas de la enfermedad y sobre todo, quieren curarla. El barrio y sus vecinos lo merecen.

1 comentario:

  1. "Ellos", los "dueños de los Bloques de Molino Nuevo, se resumen en 4 apellidos: Heredia, Cortés, Santiago y Muñoz. Combínense de dos en dos como se quiera.

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