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domingo, 17 de abril de 2016

"Los Sinfron". 30 años de Vida. Parece que fue ayer...

¡30 AÑOS DE VIDA!
                                                                  A Rafa, Inma y José Manuel
A las Comunidades Eclesiales de Base de América latina.
A las Comunidades Cristianas Populares.

Hace 30 años un grupo de jóvenes, movidos por los valores de un tal Jesús de Nazaret, iniciamos lo que año más tarde sería la Comunidad Cristiana Popular “Sin Fronteras”, los “Sinfron” como cariñosamente nos denominaban. Mayormente jóvenes que finalizábamos nuestra etapa estudiantil en el Instituto y comenzábamos los estudios universitarios. Casi todos proveníamos de barrios obreros de Córdoba, de familias becadas con las que sus hijos pudiesen tener una formación adecuada para afrontar el futuro con dignidad. Durante los primeros años fuimos descubriendo que las Bienaventuranzas no eran un utópico mensaje irrealizable, sino un testamento cargado de humanidad, a modo de anticipo de la declaración universal de los derechos humanos.
Jesús, el gran profeta de su época, fue condenado a muerte por los poderes establecidos, por su vida comprometida con los más empobrecidos, despreciados y excluidos. Su opción de vida nos marcó el camino para conseguir un mundo donde reine la utopía, quedando magistralmente recogido en el pasaje del Evangelio de Mateo: “Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí” (Mt 25, 34-36). Una utopía no confundible con la falacia. La utopía es alcanzable, la falacia niega la vida y el mensaje de Jesús. Precisamente a lo largo de estos 2000 años de la era cristiana demasiadas personas de las que dicen seguir a Jesús de Nazaret, y lo que es aún más grave hablan y enseñan en su nombre, han tergiversado su vida haciéndonos creer que Jesús fue un simple “cordero sacrificado para expiar nuestros pecados”, lo que ha servido de discurso para ir vertebrando una institución eclesial a través de una casta sacerdotal cada más vertical, excluyente y que le da las espaldas al Evangelio. Una casta que la historia nos desvela que no le ha temblado la mano a la hora de matar, excomulgar, explotar, abusar… Recogieron el testigo de los sacerdotes del Templo de Jerusalén para enriquecerse y empoderarse llenándolo de cambistas, mercaderes y comerciantes, a los que Jesús se enfrentó acusándolos de haber convertido la casa de su Padre en una cueva de ladrones (Jn 2,16).
Los “Sinfron” aprendimos bien ese mensaje, ese estilo de vida, y pronto nos pusimos manos a la obra denunciando y comprometiéndonos con lo más cercano: nuestra tierra andaluza en la que más de un 30% de sus gentes está empobrecida a causa de una injusticia larvada a lo largo de los siglos y de una Administración pública que, después de 35 años, no ha desarrollado una suficiente política social que termine con esta lacra. Además de no olvidar la denuncia a una Jerarquía católica amante del dinero, de los grandes boatos y responsable de un nacionalcatolicismo que fue el sustento doctrinal de la etapa más cruel que hemos vivido en el siglo XX, el franquismo. Aún quedan todavía reminiscencias de ese tenebroso pasado cuando vemos las procesiones rodeadas de militares, armas, himnos nacionales y banderas rojas y gualdas. Recuerdo cuando a principios de los años 90 salíamos con nuestras pancartas y octavillas a denunciar tanta hipocresía que nada tienen que ver con los valores evangélicos.  Valores del Evangelio que si supo apreciar el Papa Juan XXIII a través del Concilio Vaticano II. En aquellos años fuimos el único colectivo que nos atrevimos a denunciar el omnímodo poder de la iglesia de Córdoba al poseer la segunda Caja de Ahorros de Andalucía, Cajasur. Como un pequeño David levantamos nuestra voz contra el Cabildo catedral de Córdoba, verdadero poder fáctico de la ciudad, que ejercía su poder absolutista  a modo de nobles feudales que hacían de Córdoba una ciudad medieval sometida a su señor.
Nuestra experiencia en América Latina, con las comunidades de Perú y el Salvador, nos hizo comprender aún más el verdadero espíritu evangélico de las mujeres y hombres de estas tierras hermanas, mostrándonos la cruda realidad de la historia de una América que no fue descubierta, sino invadida, saqueada, aniquilando sus culturas. Nos hicieron ver que el mal denominado descubrimiento de América nada tuvo que ver con un encuentro de civilizaciones sino con la imposición de la cristiandad, que se creía única y verdadera y que había puesto las bases, primero en España, expulsando y aniquilando a todo lo que fuese diferente: judíos, musulmanes, humanistas…; y, posteriormente en América, llegando a la aberración de hacer creer que las personas de esta tierra no tenían alma como denunció Fray Bartolomé de las Casas. La cruz convertida en espada, una vez más,  fue la gran estratagema para ir forjando un mundo al servicio de los que profanaban el nombre de Dios. Fueron estos/as hermanos/as los/as primeros/as en apadrinar nuestra comunidad, después serían las comunidades cristianas populares de Andalucía las que nos acogerían, brindándonos todo su cariño y apoyo. Los nombres de allá: Oscar  Romero, Pedro Casaldáliga, Ignacio Ellacuría, hermana Elvira, Gustavo Gutiérrez, Helder Cámara, hermana María Huarancca…, se irían mezclando con los de acá: Diamantino García Acosta, Pilar Traver, Pepe Castillo, Lorena, Ignacio Molina, Mari Luz, las mujeres y hombres de las comunidades cristianas populares de Andalucía y del resto del Estado, la Peri de Alicante, Lolina, Carmen García, religiosas en barrios, Enrique de Castro, Enrique M. Reguera, Julián Ríos…
Conforme pasaban los años nuestro compromiso iba creciendo, de catequistas de grupos parroquiales pasamos a educadores de calle de las zonas con mayor exclusión social, experiencia que nos condujo a organizar la ONG “Asociación de educadores Encuentro en la Calle”; nos implicamos con uno de los sectores más vulnerables de la mujer, la prostitución que degrada y estigmatiza; militamos muy activamente en la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía, recogiendo el legado que nos ofreció Diamantino; formamos parte del Comité de Solidaridad con América Latina; trabajamos en el Consejo Local de la Juventud de Córdoba por una sociedad más participativa e igualitaria; nos implicamos en las cárceles repletas de personas procedentes de los barrios de exclusión social en las que continuamente se violan los derechos humanos; alzamos nuestra voz contra las leyes injustas que condenan al inmigrante a la ilegalidad, exclusión  y desprecio, lo que nos llevó a crear la Asociación Kala para acoger y ayudar a jóvenes inmigrantes sin papeles; rechazamos la institucionalización que sufren los/as niños/as retirados/as de sus familias por la Junta de Andalucía a causa del empobrecimiento social que padecen.
Llegó un momento en el que nos planteamos tener hijos/as y abrir nuestros propios hogares a los hijos de otras mujeres y otras culturas, sintiéndolos y amándolos como nuestros. Hoy son hombres  revestidos de dignidad y responsabilidad, lo que nos enriquece mutuamente. En nuestras casas también está el recuerdo de todos los que vivieron en ellas: Tito, Nöel, Juanito, Juanma R., Cheo, Susi, Rafalito, Ismael, Charli, Juanmita… Nos alegramos, nos abrazamos y nos sentimos cuando volvemos a vernos.
Este camino nos hizo madurar y sentirnos débiles. Una fragilidad que se concretaba sobre todo en el descubrimiento de nuestras carencias e imperfecciones, lagunas y defectos… Querer luchar por una sociedad más justa no implicaba que fuésemos los mejores y, mucho menos, los perfectos. En esta etapa de convulsiones, desapegos y alguna que otra ruptura conseguimos madurar para vivir con los pies en el suelo, el corazón a la izquierda y el alma de poeta, que sigue soñando y suspirando por un mundo donde, como decía Martín Luther King, llegue el día en que “aprendamos a vivir juntos como hermanos”. Hoy somos mujeres y hombres con nuestras profesiones, familias, compromisos e inquietudes. Mujeres y hombres que seguimos sintiendo y pensando en un mundo sin fronteras, en el que la justicia y la paz se vayan propagando como nuestro saludable aceite de oliva. Un mundo donde llamarse Mohammed o Manuel,  Samuel o Fátima, Florín o Indhira, Liberto o Abril sea sinónimo de riqueza cultural. Una tierra donde las diferentes etnias nos hablen de la riqueza genética. Una diversidad de lenguas, religiones, tradiciones…, armonizada como una gran orquesta sinfónica en la que de cada instrumento musical brota el milagro de conjugarse con los demás para conseguir el más sublime de los conciertos.
Hoy las casa de nuestros hijos se visten de diversidad, unas personas pueden ser africanas y otras europeas, unas personas pueden ser musulmanes o ateas y otras cristianas o agnósticas… Mañana nuestros nietos no estarán determinados por banderas y fronteras, su patria será el haber conseguido que los derechos humanos lleguen a cualquier rincón del planeta. Un mañana en el que ningún niño/a se muera por falta de alimentos o medicamentos, ninguna mujer sufra de ablaciones o malos tratos, ninguna persona sea considerada ilegal por venir de otro país, ningún hombre se sienta patriarca de su clan porque sólo habrá iguales, ninguna religión se creerá exclusiva y excluyente porque ya no modelarán a un dios a su imagen y semejanza. Un mundo donde el agua corra libre pata todas las personas, un mundo donde las energías sean alternativas y aseguren un futuro para la humanidad, un mundo donde la economía sea instrumento de una política basada en la equidad social.
30 años han sido como una semillita que ha germinado en un pequeñito árbol. Seguimos… Al menos todos los días lo regamos para que siga creciendo y, junto a otros muchos, formar ese maravilloso Edén aquí en la Tierra.
                                                           Córdoba, 10 de abril de 2016
                                                              Miguel Santiago Losada.   
Miembro de la Comunidad Cristiana Popular “Sin Fronteras” 
                             

lunes, 22 de febrero de 2016

Fe y Revolución NO son contradicción. En Gratitud y Recuerdo de Fernando Cardenal. Fallecido el 20/02/2016.

Fernando Cardenal compartió nuestra mesa común. Estas fotos están hechas en nuestro local  de CCP-Granada celebrando la eucaristía allá por los noventa.

Fernando Cardenal (Granada, 26 de enero de 1934 - Managua, 20 de febrero de 2016) fue un jesuita, en la línea de la teología de la liberación, y ministro de Educación durante el gobierno de la Revolución Popular Sandinista entre los años 1984 y 1990. Actualmente trabajaba como Director Nacional de Fe y Alegría Nicaragua y era hermano del poeta Ernesto Cardenal (1925-).


En 1980 estuvo al frente de la denominada Cruzada Nacional de Alfabetización, una campaña por la alfabetización en Nicaragua que logró enseñar las primeras letras a más de medio millón de personas y que permitió reducir el índice de analfabetismo, superior al 50 % en la época de la dictadura de Somoza, hasta un escaso 13 %. Esta tarea obtuvo el  premio de la medalla Nadezhda Krúpskayae de la Unesco en 1981.

El 4 de febrero de 1984 el papa Juan Pablo II suspendió a divinis del ejercicio del sacerdocio, a los sacerdotes Ernesto Cardenal (ministro de Cultura), Fernando Cardenal (ministro de Educación) y Miguel d'Escoto (ministro de Relaciones Exteriores), por estar adscritos a la teología de la liberación y por ejercer como ministros de la revolución sandinista. Ellos permanecieron en sus cargos, conscientes de su deber con los pobres y con su pueblo, y sabiendo que así estaban realmente sirviendo a la causa de su fe y del Reino de Dios. Treinta años después, el 4 de agosto de 2014, el papa Francisco levantó esa suspensión.

En Fernando, varias generaciones de jóvenes nicaragüenses, muchachas y muchachos, encontraron un guía para asumir un compromiso con Nicaragua, con los empobrecidos, y por su liberación. Fue, durante un tiempo, también Vicecoordinador de la Juventud Sandinista.
El compromiso, la vocación de servicio, la integridad a toda prueba, el amor a Nicaragua… caracterizaron a Fernando Cardenal durante toda su vida. Descanse en Paz…

En esta foto: Fernando Cardenal con Rafa Briones, Pepe Castillo, Juan Lanza, Antoñete, Pedro Gómez y Encarnita...  
  "A pesar de todas estas tristezas, soy un hombre de esperanza. El último capítulo de mis Memorias publicado hace dos años se llama: ESPERANZA. Para mí lo fundamental de ella es que creo profundamente en los jóvenes.

Trabajamos juntos en la lucha contra la Dictadura Somocista desde el Movimiento Cristiano Revolucionario. Entonces fui testigo directo de su entrega, su mística, su valor ante el peligro de ser asesinados (14 perdieron la vida). Luego fui también testigo directo de las maravillas de valor y compromiso, en algunos caso hasta el heroísmo, de los 60.000 jóvenes voluntarios que se fueron a las montañas en la Cruzada Nacional de Alfabetización. Y después trabajé 5 años con la Juventud Sandinista, la juventud de la revolución.

En estos tres escenarios encontré que los jóvenes tenían una fuerza interior muy grande y  una entrega sin límites para trabajar en todas las tareas en beneficio del pueblo. A mí no me cuentan cuentos. Yo estuve con ellos y ellas. Ellos son mi esperanza. Sólo hace falta que la sociedad les ofrezca una causa grande, noble, bella, si es difícil, mejor, y que al frente de ella haya personas con autoridad moral. “YO ESPERO QUE LOS JÓVENES REGRESEN A LAS CALLES A HACER HISTORIA"
Con Domingo, Carmen, Conchi, Pilar, Migue, Cati, Manuela, Mari Pepa, Ricardo, Mari Paz, Rosalía, Pili López...etc.

miércoles, 10 de febrero de 2016

21 Años sin Diamantino: "Convertirse es Vivir una Vida de Calidad".

CCP de Andalucía: 21 años sin Diamantino (9 de Febrero del 95).  Cura obrero. Párroco de los Corrales (Sevilla) Fundador del SOC (Sindicato de Obrer@s del Campo) y la APDH (Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía). Amigo, compañero, profeta, uno de los nuestros...Siempre en nuestra memoria. 

Iniciando hoy "La Cuaresma" reproducimos un escrito de Diamantino: "Convertirse es Vivir una Vida de Calidad". Cuaresma 1990.

CONVERTIRSE ES VIVIR UNA VIDA DE CALIDAD. Diamantino García.

CUARESMA DE LA ALEGRIA

La Pascua es el triunfo de la vida sobre la muerte. La Cuaresma no es solo preparación sino que es anticipo de la celebración de la vida. El primer anuncio de la Cuaresma es de ALEGRÍA. Cuaresma no tiene que ser sinónimo de mortificaciones y complejo de culpa.
Vivir en la negatividad es hasta blasfemia.
En lugar de mortificaciones,  VIVIFICACIONES.
En lugar de privarme de comer algo, INVITAR a alguien a comer.
En lugar de ahorrar para no gastar, poner a disposición de otro que lo necesite para así COMPARTIR.
En lugar de penitencias, CONVERSION.
En vez de imponerme la penitencia de no criticar a nadie,  proponerme el descubrir las cosas positivas de los demás.
En vez de proponerme el sacrificio de aguantar en silencio cuando hacen crítica de alguna actitud mía, hacer el propósito de escuchar las razones del otr@ poniéndome en su caso.
En vez de imponerme el sacrificio de no perder el tiempo viendo un programa de televisión, sacar tiempo para compartir en la casa de algún vecin@ un rato agradable.
En lugar de complejo de culpa, sentimiento de poseer la gracia de DIOS, que es la CREATIVIDAD.. Cambiar la actitud negativa de que tengo tantos defectos, tantas limitaciones y de que valgo tan poco..., por la actitud positiva de que soy una persona de suerte porque DIOS se ha empeñado en mí, porque conozco la esperanza evangélica, porque cuento con amigos-as realmente excelentes, porque cuento con un grupo, familia, que difícilmente se encuentra, etc… En cierto modo soy una privilegiad@ y por ello tengo que dar gracias a DIOS, a los otros. Estar content@, optimista. Sintiendo mucho más la gracia que la culpa.
En esta Cuaresma tenemos que hacer la traducción en positivo de la mortificación, del ayuno, del sufrimiento. Porque, el DIOS de la Vida que sacó a su  Hijo de la muerte, nos llama a todos a VIVIR. Cada victoria sobre nuestro egoísmo es ya una parte de Pascua.
En lugar de obsesionarme por la manía de mortificar mi hablar, mi pensar, mi actuar,... procurar trabajar por ser más libre, más espontánea. La libertad es más positiva que la mortificación. 
En lugar de .proponer ayunos, limosnas..., incitar a la solidaridad. Ya lo dice el Señor: …”el ayuno que yo quiero, que a mí me gusta, es visitar al huérfano y a la viuda y abrir tu carne al necesitado”. La solidaridad es la forma concreta hoy día de practicar la caridad. No busquemos sufrimientos artificiales para ser virtuosos, sino que compartamos solidariamente el sufrir de !os demás, para así ir superando todo sufrimiento.

CUARESMA DE VIDA

Si la Pascua es el triunfa de la Vida sobre la muerte, la Cuaresma es un anticipo de ese triunfo.Y la mejor manera de mostrar ese anticipo del triunfo de la Vida plena, es ya, ir llevando aquí una vida de calidad. La Conversión no es otra cosa que esforzarme por vivir una vida de calidad en un mundo de vidas tan superficiales, rutinarias, consumistas. Vivir una vida de calidad en esta saciedad, no es cosa fácil: es conflictivo. Incluso tenemos que pagar el precio de ser bichos raros, marginados. Nosotr@s, como creyentes,  podemos asumir la cruz de la conflictividad, de la marginación, siguiendo sin temor el camino que ya recorrió Jesús. En el sentido de vivir la cruz de la cuaresma, pero no una cruz que mata sino que vivifica.
En este sentido hemos de tener las cosas muy claras: No dejaremos de ser fieles por temor a “quemarnos”. En la conflictividad que asumimos, hemos de ser sencill@s pero no ingenu@s; prudentes pero no escurridiz@s. Hemos de discernir, como Jesús, los signos de los tiempos y del lugar, para actuar consecuentemente. Y en los momentos precisos, no guardaremos la vida, sino que podemos dar la cara.

CONVERTIRNOS AL AMOR Y A LA SOLIDARIDAD, ESA TIENE QUE SER NUESTRA CUARESMA.
La vida y la felicidad y la realización de toda persona honesta están en el amar, en el compartir, en el vivir con y para los demás. Con esto, no solo imitamos a Dios que se solidarizó con nosotros y se hizo pobre, marginado, perseguido, ejecutado; sino que hacemos presente a Dios en nuestra vida porque ÉL ES AMOR.
Vivir en solidaridad es calidad de vida, porque el otro es para ti, no un rival sino complemento, estímulo, fuente en tu propia personalidad.
El que no ama está muerto. Y es el egoísmo el que va matando en ti el amor, que es la auténtica vida. Es lo que llamamos crucificar el egoísmo y el individualismo, en sentido positivo, cultivando la solidaridad.
EN LA CUARESMA PODEMOS RENACER COMO MUJERES Y HOMBRES NUEV@S.
Nuestra fe, nuestra religiosidad, ha de estar avalada por el testimonio de una vida austera y desprendida. Buscando siempre la coherencia y la transparencia entre lo que pensamos y lo que vivimos. Es muy conveniente en este sentido que nos ayudemos de los demás, que busquemos la
corrección fraterna para huir de las desviaciones individuales, personalistas, obsesivas... Hemos de conjugar generosamente la ACCIÓN Y LA CONTEMPLACIÓN; la oración y la lucha por la justicia; la militancia y la acogida; el coraje y la ternura.
Orar es abrirse al SER; dejarse invadir por la presencia del SER. De este modo orar es:
CONTEMPLAR El Ser bueno, bello, verdadero.
AGRADECER: Todo lo creado. AMAR: porque ahí radica la FELICIDAD. Orar es dejarse interpelar por la PALABRA DE DIOS, que se ha hecho vida en cristo Jesús,

Orar es entrar en la profundidad de todo, porque ahí, en lo profundo encontramos a Dios. Lo mismo da que cantemos los salmos, que contemplemos el árbol, que meditemos un libro o que estemos cocinando…Dios está ahí, cuando sabemos llegar al fondo de las cosas. La Cuaresma es un tiempo muy propicio para ser profundos en la vida. Podemos evitar la dispersión, la superficialidad, las prisas, el activismo de tan escasos resultados…Porque con frecuencia, siempre nos falta tiempo. Sólo tenemos prisa. El orar nos parece con frecuencia una complicación más y una solemne pérdida de tiempo. Es cuestión de PACIFICARSE. Podemos DISFRUTAR DEL TIEMPO, de los trabajos, de las cosas. Es cuestión de relativizar y buscar prioridades ACEPTANDO LIMITACIONES. Es cuestión de organizarse. La Cuaresma, así tomada, nos puede ayudar a comprender que solo una cosa es necesaria: DIOS.

Diamantino García Acosta. Cura obrero. Párroco de los Corrales (Sevilla) Fundador del SOC (Sindicato de Obrer@s del Campo) y la APDH (Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía).  .
Cuaresma de 1990.
Carlos Cano: Diamantino y Verde, blanca y verde.
Lucía Sócam, JJ Téllez: A Diamantino García Acosta.

jueves, 29 de octubre de 2015

Tod@s Sant@s. Gracias por el Camino junt@s compartido..

En el día de tod@s l@s Sant@s: ¡Gracias por el lujo de haber compartido junt@s tantas Utopías y Esperanzas!. Con nuestro especial recuerdo a Manuela, Cati, Encarnita, Pilar y Miguel.

SOMOS LA VIDA, NO HAY LUGAR PARA EL TEMOR. (Pincha, si quieres leer más)
La Ola también es el Mar ....
"La vida no es algo que tenemos y podemos perder. SOMOS VIDA, y el engaño radical consiste en creernos separad@s o desgajad@s de ella. No somos un yo particular que tiene vida, somos LA VIDA que se expresa temporalmente en la forma de este yo particular".
http://www.enriquemartinezlozano.com/somos-la-vida-no-hay-lugar-para-el-temor/

GRACIAS A LA VIDA. de Violeta Parra, por Mercedes Sosa y Joan Baez:
Gracias a la vida que me ha dado tanto 
Me dio dos luceros que cuando los abro 
Perfecto distingo lo negro del blanco 
Y en el alto cielo su fondo estrellado 
Y en las multitudes el hombre que yo amo. 
Gracias a la vida que me ha dado tanto 
Me ha dado el sonido y el abedecedario 
Con él las palabras que pienso y declaro 
Madre amigo hermano y luz alumbrando, 
La ruta del alma del que estoy amando. 
Gracias a la vida que me ha dado tanto 
Me ha dado la marcha de mis pies cansados 
Con ellos anduve ciudades y charcos, 
Playas y desiertos montañas y llanos 
Y la casa tuya, tu calle y tu patio. 
Gracias a la vida que me ha dado tanto 
Me dio el corazón que agita su marco 
Cuando miro el fruto del cerebro humano, 
Cuando miro al bueno tan lejos del malo, 
Cuando miro al fondo de tus ojos claros. 
Gracias a la vida que me ha dado tanto 
Me ha dado la risa y me ha dado el llanto, 
Así yo distingo dicha de quebranto 
Los dos materiales que forman mi canto 
Y el canto de ustedes que es el mismo canto 
Y el canto de todos que es mi propio canto. 


" QUIERO HACER CONTIGO, LO QUE LA PRIMAVERA HACE CON LOS CEREZOS"



"CREEMOS EN LA UTOPÍA PORQUE LA REALIDAD NOS PARECE INCREÍBLE"



"¿HABRÁ VIDA ANTES DE LA MUERTE?"

Gracias por SER...
"LO IMPOSIBLE SOLO TARDA UN POCO MÁS"

"TODA VIDA ES ETERNA"

"¿Y SI LO SOBRE- NATURAL ESTUVIERA DENTRO DE LO NATURAL?"     
                 
Mt 5, 1-12
...Al decir tod@s, celebramos la Santidad (Dios), que se da en cada un@ de nosotr@s. No se trata de distinguir mejores y peores, sino de tomar conciencia de lo que hay de Dios en tod@s y dar gracias por ello.
...Si tomamos conciencia de que en Dios-Amor tod@s somos un@, comprenderemos que lo que cada un@ puede vivir de Dios-Amor, de alguna manera, lo viven tod@s y beneficia a tod@s.
... Dioa-Amor no nos ama porque somos buenos, sino porque Él es el amor y está en cada uno de nosotr@s.
...Las bienaventuranzas quieren decir que es preferible ser pobre, que ser rico opresor; es preferible llorar que hacer llorar al otro. Es preferible pasar hambre a ser la causa de que otros mueran de hambre porque les hemos negado el sustento. Dichosos, no por ser pobres, sino por no ser egoístas. Dichosos, no por ser oprimidos, sino por no oprimir. La clave sería: Las riquezas no son el valor supremo. El valor supremo es la  Persona. Hay que elegir el reino del poder o el Reino de Dios-Amor. Si elegimos el ámbito del dinero, habrá injusticia e inhumanidad. Si estamos en el ámbito de lo divino, habrá amor y humanidad.
...Si todo ser humano tiene un fondo impoluto (Dios-Amor), Dios tiene que amarnos precisamente por eso que ve en nosotros de sí mismo. No puede haber miedo a equivocarse. Todos son santos en su esencia, y eso es lo que se integra en Dios porque nunca ha estado separado de él.
Recordar a los difuntos entraña dar gracias a Dios por todos aquellos seres humanos que han hecho posible que nosotros seamos lo que somos hoy. 
...Yo no tengo que escalar ninguna cima inexpugnable, ni conseguir ninguna meta inalcanzable. Solo tengo que abandonar la dispersión en la que vivo y centrarme en lo que ya soy en lo hondo de mi ser. Fray Marcos.
Defender la ALEGRÍA es un acto REVOLUCIONARIO. Tod@s seguimos Caminando Junt@s. Gracias por vuestro ejemplo.