El presidente del gobierno español anunció que se aprobará ya una ley para implantar un Ingreso Mínimo Vital, según proponía el PSOE en su programa electoral. El Ministerio de Seguridad Social indica que dicho Ingreso Mínimo garantizará a sus beneficiarios entre 462 euros y 1.015 euros al mes, según sea la situación familiar y que tal ayuda se podrá solicitar a partir del 1 de junio.
A la espera de conocer los aspectos concretos de esta ley tan necesaria y urgente, así como su posterior desarrollo, surge una pregunta inquietante y exigente a la vez: ¿va a ser para todas las personas? En principio, el mismo Pedro Sánchez ya ha dicho que NO, puesto que “Podrán percibir el ingreso las personas españolas e inmigrantes con permiso de residencia que lleven en España un año al menos. También podrán percibirlo las víctimas de trata y las de malos tratos, así como los solicitantes de asilo”.
Ese requisito de un año de residencia previa rompe el principio de igualdad y atenta gravemente contra el Artículo 14 de la Ley de Extranjería que establece: “Las personas extranjeras residentes tienen derecho a acceder a las prestaciones y servicios de la Seguridad Social en las mismas condiciones que los españoles”.