sábado, 29 de abril de 2017

En recuerdo y memoria de Antonio Caballero, de las CCP de Antequera. Camina con nosotr@s.

En memoria y recuerdo de Antonio Caballero, amigo, hermano y compañero de las Comunidades Cristianas Populares de Antequera. que murió a "esta vida" el pasado lunes 24 de Abril de 2017 y pasó a "vivir de otra manera". Nosotr@s, compas de CCP lo sentimos resucitado "en cada brazo que se alza para defender al pueblo del dominio explotador...", lo seguimos sintiendo vivo y camina con nosotr@s en nuestras luchas, compromisos y esperanzas por un mundo nuevo, más justo con los empobrecid@s y en paz. Gracias a la Vida por habernos dado la oportunidad de compartir con Antonio tantas utopías, encuentros, luchas y la belleza del camino....
Transcribo abajo la semblaza que Jose Antonio Rojo, su compañero de vida, me ha enviado, lleno de cariño y desde el corazón, con los colores de su bandera republicana y el himno a la Libertad de su querido Labordeta:
Nos ha pedido Domingo una semblanza de Antonio escrita con el corazón. 

Son muchas cosas en muy pocos días las que estoy viviendo del lunes para acá para poder hacerla. Tanto más cuando han supuesto un descubrimiento entre todos de un Antonio que no conocíamos. Eso se condensó en el acto de despedida, que creo que acertamos a hacerlo como él quería: una despedida espontánea de sus amigos, que representaban todas las facetas de su vida. Facetas que supo aunar, como creo que todos lo vamos haciendo. 

Fue en el tanatorio, en una sala desnuda, sin símbolos, fría. Pero que se nos hará inolvidable y entrañable porque la subimos de temperatura  con nuestros testimonios llenos de calor, sinceridad, cariño. Cada uno expresó lo que vió en Antonio. Lástima que a muchos la emoción no les permitió hablar como hubieran deseado.  

Voy a transcribir algunas de las cosas que allí se dijeron y me han dejado por escrito. Es una pena  que no tenga otras que se dijeron, como la de nuestros compañeros de ruta de IU. Detrás de todos estaba como referente el anhelo, que era el de Jesús, de trabajar por un mundo mejor, de hermanos. Por eso no fue de ninguna manera, creo, forzado el expresar ese anhelo, como Benito lo sugirió, a la manera como Jesús lo hizo, con el Padrenuestro. Y después, cantando con entusiasmo, como Antonio lo hacía, el Canto de la Libertad, de otro compañero de ruta, Labordeta.

Primero, creo que fue Charo la que leyó una carta con la que Antonio contestó a una que ella le había escrito, a costa de la bandera republicana, y que parece  que expresa la síntesis a la que había llegado a su manera Antonio:

Amiga Charo: 
Gracias por tu sincera opinión  sobre mi posición de la bandera republicana en la Eucaristía. Estate tranquila, no me disgusté; cuando se lucha contra corriente se esperan contradicciones; mi revolución es pacifista, democrática, liberadora, solidaria con las pobres víctimas, como la lucha de los jesuitas Nicaragüenses, “entre religión y revolución no hay contradicción”.

No sabía de la desgraciada muerte de tu querido abuelo, y me gustaría saber el año y las circunstancias que fueron. Me atengo a la cita que haces del Evangelio, “el que esté libre de pecado que tire la primera piedra”.
Las banderas nos identifican y animan a la revolución y no matan a nadie; la gente desalmada y loca son los que matan. Veo que eres republicana; pero el sistema republicano español no caerá  del Cielo, hay que conquistarlo con manifestaciones públicas y con el pueblo. 

La celebración de la Eucaristía se hace de muchas formas, sabes lo mucho que las CCP en pocos años hemos cambiado; y sospecho que Jesús cambiaría más por su talante liberador el Hombre Nuevo que mirando al futuro dijo “vosotros haréis cosas mayores”.
Charo, con esta frase de Jesús y un beso mío, ¡ánimo!

El testimonio de Enrique puede servirnos un poco para “encuadrarle”. Prefiero dejarlo tal cual, aunque tenga alguna inexactitud que no lo devalúa:

Se nos ha ido de este mundo  Antonio.
Creo que eran el año 70 del siglo pasado cuando tuvimos noticias a través de la Hoja Parroquial de Sevilla de que un grupo monjes de la Trapa la dejaban y se vinieron a vivir a una finca del término  de Antequera llamada Chinchilla. Ahora  no recuerdo con certeza pero creo que eran cinco. Querían vivir la vida espiritual en medio del mundo, dependiendo de su trabajo manual, cercanos a la gente jornalera. El sitio era una antigua escuela rural perteneciente al obispado de Málaga.

                      La novedad de la ”vida monacal” en contacto con el mundo jornalero llamó mucho la atención  a la Iglesia postconciliar y fuimos muchos  los que por allí pasamos con la intención de conocer a aquellos trapenses que se hicieron jornaleros. Dos estaban ordenados de sacerdotes y los otros dos hermanos. Uno aparecía como  más preparado intelectualmente y  el otro como  uno  más  de entre los jornaleros .Antonio tenía la sabiduría popular. Hombre sencillo, austero, alegre, servicial. Se vinculó al partido comunista y a comisiones, aunque me pareció que  nunca fue fanático ni de las ideas ni de los planteamientos. Vivió los valores del Evangelio a tope. Jesús de Nazaret fue siempre su referente.

El grupo disminuyó. Durante muchos años ha vivido con el compañero del alma Jóse, en una pequeña casa aquí, en Antequera. Desde donde han ido atendiendo a muchos necesitados.

Ninguna reivindicación por la causa del ser humano le era ajena. La provincia no era obstáculo, se desplazaba a donde fuera con tal de estar presente en cualquier  acto reivindicativo, también en actos formativos. Se hizo miembro de los caminantes de San Francisco. Gozaba bastante con la Naturaleza. En cuanto tenía ocasión nos comunicaba lo que había gozado.
Desde hace algún iba acompañado con la bandera republicana. Lástima que la sordera le impidiera poder  muchas veces enterarse de  los acontecimientos y hacía difícil el entendimiento.

No puedo decir que descanse en paz porque no será posible hasta que muchas de sus reivindicaciones no se consigan. Pero si quiero  decirle que conocerle a él ha sido toda una gozada.

De muchos de los que no pudieron estar allí he recibido muchos mensajes: He aquí sólo algunos:

Ayer murió un amigo, Antonio Caballero Paunero. Un hombre sencillo que siempre asumió la lucha obrera como quien asume una necesidad basica como comer o dormir. Sus planteamientos del mundo no eran enrevesados, no tenía doblez y su abrazo siempre fue un abrazo cálido. Hoy se cumple el aniversario de la revolución de los claveles algo que el siempre celebró. Hoy más que nunca, Antonio subirá al cielo envuelto en aquella bandera republicana con la que solía cubrirse en los encuentros, pero ahora ya escuchará perfectamente las voces de Diamantino, Manolo Hernández, Ezequiel, Miguel y de otros muchos mas sin necesidad de sonotone. (Loly)

Nos ha dejado uno de los imprescindibles. De las mejores personas que he conocido en mi vida. Cristiano comprometido con las personas, luchador incansable contra todo tipo de discriminación, contra todo tipo de jerarquías. De ideas claras, de corazón enorme y valiente como él sólo.¡¡Antonio, te echaremos mucho de menos, compañero!! (Scota)












Canto a la Libertad. J.A. Labordeta.


domingo, 23 de abril de 2017

¿Quién resucita hoy? María Teresa Carmona

 ¿Quién no ha sentido, en algún momento de su vida, la experiencia de morir? ¿Quién no ha sufrido el dolor físico, casi somático, de una separación indeseada, de una palabra mal dicha, de un proyecto que se trunca, de un no sentirse comprendido o aceptado?
Cada uno de nosotros lleva grabadas infinitas pequeñas muertes en su geografía íntima. A veces tan pequeñas que no dejan cicatriz visible, pero aun así muy grandes. Lo suficiente como para que nos permitan reconocer esas mismas señales de dolor en otros cuerpos y rostros: las bolsas bajo los ojos de la señora que coge el autobús a las seis de la mañana, el ceño fruncido del funcionario que apenas musita un buenos días, el temblor en la voz de quien recuerda aquel amor del pasado, la inseguridad de la adolescente que se compara con sus amigas, la frustración del que no tiene trabajo, o de quien se busca cada mañana en el espejo y no se encuentra. No hace falta tener grandes problemas para sentirnos morir un poco (¿cuántas veces habremos alzado al cielo de otros ojos nuestra plegaria sentida y sincera, como diciendo calladamente: “¿por qué me has abandonado?”).
Sí, cada uno de nosotr@s es un testimonio encarnado de resistencia, de resiliencia (ahora que tanto se emplea esta palabra), de aprender a respirar hondo y reencontrar el ánimo, “el ánima”, ese soplo vital que nos mantiene vivos. Porque estamos hech@s para resucitar. La nuestra es una bella historia de resurrección, un milagro de fortaleza en la fragilidad que nos impulsa una y otra vez a despertar del letargo, a ponernos en pie, afianzarnos sobre la tierra, dejar atrás nuestras fosas y encierros, y seguir caminando con la cabeza erguida y el pecho descubierto. Para volver a la vida, sí, pero no a la de ayer. Resucitar es recrearnos entrañablemente: asomarnos a aquello que nos duele y acariciarlo como quien unge el cuerpo o los pies de la persona amada. Acoger, aceptar, amar, conmovernos desde las entrañas. Y atrevernos a salir, sin pudor, expuestas las heridas en señal de victoria, más conscientes de nosotros mismos, renacidos y aún dispuestos a hacerlo todo nuevo.
La anastasis es ese dinamismo interno que TODOS y TODAS experimentamos al sentirnos liberados de nuestros miedos e infiernos. De nada sirve admirar este milagro de la Pascua cristiana, este rito de paso o transición, si después no lo reconocemos en nuestra vida cotidiana. Y de poco sirve, además, esta experiencia de sanación personal si no transforma nuestro modo de contemplar a los demás y convivir con ellos. Quien ya pasó por una situación parecida comprende a quien ahora está sufriendo, sabe escuchar (porque también un día necesitó esa acogida), sabe acariciar con palabras y con gestos, domina el lenguaje de la ternura, y sabe conceder espacio, tiempo y dignidad a quienes se encuentran librando esa dura batalla. Porque un día fue también la suya; porque es la de todos.
Cada uno de nosotros está llamado a ser testimonio de resurrección para quienes no alcanzan a ver (y aguardan anhelantes) el estallido del alba. En silencio, nos decimos: “Yo pasé por ese trance que tú atraviesas hoy y salí fortalecido. Sé de tu dolor y me conmueve. Y en cuanto quiera que venga a partir de ahora, no estarás solo/a. Seguimos adelante. Estoy contigo”. Ayudarnos a morir, ayudarnos a vivir: he aquí el milagro que se entreteje cuando dos o más personas se reconocen desde la com-pasión y el amor. La radicalidad de este sentir común, de esta comunión que se llena de sentido por lo sentido, nos moviliza e interpela a adoptar una nueva manera más sensible, empática y receptiva de estar en el mundo. Renacidos una y otra vez de tantas pequeñas crisis, albergamos en nosotros un espíritu de sabiduría y fortaleza que nos impulsa a ser portadores de paz, “resucitadores” de otros.
Luego están esas otras muertes: las que nos arrancan de nuestro lado y para siempre a las personas que amamos y que nos aman, y dejan henchido de ausencia el espacio que antes ocupaba su figura. Hermoso y triste vacío habitado. Quien más, quien menos, sabe a qué me refiero. Hace algo más de dos años perdí a mi mejor amigo y no ha pasado un solo día en que no lo haya recordado. Como la Magdalena, también yo fui al sepulcro para visitar y honrar el último lugar en la tierra donde reposó el cuerpo de mi amigo. Sabía que no lo encontraría allí, que aquel nombre sobre esa lápida fría poco o nada podría decirme del hombre que yo había conocido. Fui, no obstante, porque más allá del vértigo que produce el abismo, somos materia en busca de un abrazo. Y, como hemos hecho tantos, lloré junto a su tumba la tristeza de no volver a verlo. Enterramos a nuestros muertos pensando que con ellos muere también una parte de nosotros mismos, una determinada manera de pronunciar nuestro nombre, retazos de una historia hecha recuerdos.
Transcurre el tiempo (tres días, tres meses, tres años) y, en un determinado momento, incomprensiblemente, ciertos lugares parecen reavivar en nosotros aquella presencia tan amada. Resuenan en lo profundo sus palabras, como el eco de una musiquilla que creíamos olvidada. Comenzamos a revivir instantes y destellos de experiencias compartidas. Y descubrimos con sorpresa que los consejos y enseñanzas de las personas que amamos todavía nos acompañan, nos conforman e iluminan el camino. Así debieron sentirlo los discípulos de Jesús (mi espíritu permanece con vosotros), siendo en realidad una experiencia al alcance de todos. Y cuando esto ocurre, nace en los labios (rebosa del corazón) la sonrisa cómplice y serena de quien, al fin, comprende todo. Y sabe (porque lo ha experimentado) que el milagro de la Vida que se entrega sin medida consiste en un irse dando poco a poco, en un quedarse en los demás cada vez con mayor hondura, en un dejar los corazones sembrados con la belleza de los encuentros.
También era esto, resucitar: un reavivar muy dentro esa mirada que alguien (Alguien) nos regaló un día, haciendo que ya nada volviera a ser lo mismo. Un abrirse a la certeza de un Amor partido y repartido, capaz de inaugurar otra forma de comunión y de presencia. Y un alegrarse sin medida y un agradecer el poder transformador de ese Amor. Agradecer siempre. Porque, al cabo, ¿quién no ha tenido alguna vez esta experiencia de resurrección?
 María Teresa Sánchez Carmona

domingo, 16 de abril de 2017

Celebración de la Vida, la Libertad y la Memoria subversiva y apasionada de Jesús. Sábado 15 de Abril de 2017. CCP- Granada 21.00H.

Comenzamos la celebración de la Pascua de Resurrección y florida, a las 21.00h. en el salón de CCP-Granada. Este año nos hemos servido de las celebraciones de nuestros compas de CCP de Zaragoza y Valencia..Gracias a tod@s

1. NTRODUCCIÓN: (ISABEL)
 ¿A qué experiencia humana responde hoy el mito o creencia pascual?
Pascua es el paso, el tránsito del sufrimiento y de la limitación al logro y a la plenitud.
A  escala personal puede ser un referente del tránsito  vida-muerte-plenitud.
A  escala social es un referente del paso de la dominación y el sufrimiento a la esperanza como réplica y a la compasión con que se ama.
Históricamente: La pascua es una celebración religiosa judía. Es la celebración del Paso de la esclavitud a la libertad. Jesús no llegó a celebrar en Jerusalén aquella cena pascual del cordero, sino la de su despedida clandestina con sus discípulos y discípulas, perseguido por su crítica al sistema religioso y político y por su opción por la justicia.
 La semana santa tradicional insiste  en la magnitud del pecado, para resaltar el valor de la redención.  El mito del rescate, a través de la muerte del  hijo hoy nos parece inaceptable, pero la indiferencia ante el sufrimiento, también nos parece inaceptable.  El mal es una realidad, pero vivir y amar es su antídoto y desde la debilidad  anhelamos  plenitudes y resurrecciones personales y colectivas.
Nosotros hoy no celebramos la muerte de Jesús, celebramos su vida, queremos mantener vivo su recuerdo, que “nada de su vida se pierda”. Este esfuerzo realizado durante siglos y siglos de cristianismo hace que hoy Jesús realmente “viva” entre nosotros.
Buscamos unificar las secuencias del año litúrgico, variantes de un único proceso, para no asimilarlas a un proceso histórico real. La Iglesia cristianizó, en su liturgia, las fiestas del ciclo solar. Hoy,  sería útil realizar el camino de vuelta: Todos los inviernos se apaga la vida, pero la vida espera, empujando, en cada nueva  primavera, en cada pascua, igual que esperan nuestras ilusiones y proyectos.
Pascuas, pasos y tránsitos: éxitos y fracasos de la evolución. Procesiones y pasos de una vida, de un mundo.  Hoy celebramos que es  posible mantener esa experiencia de tránsito de la limitación a la resurrección entendida simbólicamente, aunque no podamos  definir lo simbolizado más que como  un anhelo, una vivencia.
Por eso podemos celebrar los pasos, cada paso, todos los pasos. Los que llevan al éxito y los que se pierden en la inconsciencia o el fracaso... recordando también la cena clandestina de Jesús y su paso por el fracaso. Celebrando el paso de la muerte a la vida, anhelamos una resurrección moral en la humanidad.
  
2.     RITO DE LA LUZ: ( En el salón, encendemos una vela)

ORACIÓN SOBRE EL FUEGO  (RAFA)
     “Oh VIDA, fuente de toda luz y de toda alegría, con Jesús, nos has dado el fuego de la Luz, para que lleguemos a ser  luz del mundo. Esta comunidad se congrega hoy en torno a este fuego para celebrar la fiesta de la resurrección de la Vida y de la Libertad. Gracias por Jesús, amigo y hermano. Amén. “
(Se enciende el Cirio pascual)
Canto nº 2: Somos Luz.
          PREGÓN PASCUAL (RAFA)
        “Amigos y amigas, alegraos.  Abramos de par en par los ojos de la fe y veamos a Cristo Resucitado. Todo su ser transfigurado y radiante nos está revelando el verdadero rostro de su fracaso y de su cruz. El nos dijo: Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no anda en tinieblas. Es la victoria del  servicio. La luz brilla en las tinieblas y las tinieblas no pueden detenerla. Todo lo que sea luz, enciéndase esta noche. Brillen sin timidez nuestras esperanzas del Reino   de Dios, porque también nosotros tenemos que ser luz del mundo, personas nuevas que construyen la paz ladrillo a ladrillo.                                                      No nos dejemos engañar por falsos brillos de dinero, poder, fanatismo o fuerza bruta. Alcemos la luz de la verdad que nos hace libres y que sea esta libertad nuestra única arma frente a los poderes opresores. Pongamos el corazón en sintonía con la Buena Noticia del Evangelio, para que por medio de nuestra acción Jesús continúe hoy junto a l@s pobres, a los marginad@s y explotad@s; cercano a l@s excluid@s, enferm@os, prostitut@s, emigrantes, mujeres, niños…                               
Bendecimos la Fuerza de la Misericordia, más que nunca en esta noche, porque esta noche es la noche de la Liberación.  Esa Fuerza de misericordia sacó a Abraham de la oscuridad del paganismo;  al pueblo esclavo en Egipto lo libró de las tinieblas de la esclavitud; encendió la palabra de los profetas para que iluminaran los oídos apagados; alzó del suelo al oprimido para sentarlo entre los principales; admiró la humildad de María  para proclamarla dichosa entre todos las mujeres de la tierra; y a Jesús, le hizo capaz de acoger el sufrimiento y la muerte y confiar plenamente en la VIDA.                                                            
Por eso, en esta noche nos sentimos convocad@s a celebrar con cantos de alegría todo lo que significa liberación humana.  Haz que nuestras vidas sean luz en medio de toda esta tiniebla de corrupción y poder, para que el mundo recobre la alegría primordial y la sencillez natural que hemos ido perdiendo a lo largo de la historia. Que salgamos alborozad@s, con las lámparas encendidas, al encuentro del Esposo, que, vencedor de la muerte, vive y reina glorioso por los siglos de los siglos. Amén”
Canto nº 4: Están libres nuestras manos.

3.    LITURGIA DE LA PALABRA:
  1ª LECTURA: (Relectura del Génesis)….( DOMINGO)

Al principio creó Dios el cielo y la tierra.
Y dijo Dios:
“Hagamos al ser humano a nuestra imagen y semejanza”
Y creó Dios al ser humano a su imagen, a imagen de Dios los creó, hombre y mujer los creó.
Y los bendijo Dios y les dijo:
“Sed mi imagen en el mundo. Sois amor como yo. Cread amor en todo, como yo. El amor es el creador de todo. Y todo es amor, como yo.
Ahí os dejo el planeta Tierra como casa común de la gran familia humana. Ella es la Pacha Mama, la Madre Tierra que os sustenta, alimenta y cuida. Amadla y cuidadla como yo la amo y cuido. Y así os amáis y cuidáis.
Admiradla en su grandeza y en su pequeñez en el Universo inmenso. En su belleza estoy yo acompañándoos. La belleza y la gratuidad son muestra de mi amor. Como imagen mía que sois, apreciadla, cuidadla y disfrutadla.
Y así fue.
Y vio Dios todo lo que había hecho, y era muy bueno.
                        Palabra humana sobre Dios-Vida.
Canto nº 90: Flor de Jara. Luis Pastor.

2ª LECTURA: (Del éxodo de hoy: Santiago Agrelo Martínez. Arzobispo de Tánger. (Pío)
La tarde en Beliones trajo la misma historia de las últimas semanas: un sin número de soldados y ni un solo emigrante. 
Política migratoria con mayúsculas: ¡No se ven emigrantes! ¡No hay emigrantes!
La UE "comprende" que los Estados Unidos de América hayan castigado a Siria con el lanzamiento de 59 misiles, ¡y no comprende por qué miles de jóvenes subsaharianos han llegado hasta sus fronteras del Sur!
La UE "condena" a Siria, sin preocuparse siquiera de comprobar si es real el motivo por el que condena, y no condena a los Estados Unidos, que alardean de haber violado el territorio de un país soberano.
La hipocresía se nos ha hecho tan connatural que ni siquiera nos preguntamos qué sucedería si un loco lanzase, con un pretexto o sin él, un solo misil sobre una base militar de los Estados Unidos.
Mientras los poderosos juegan a la guerra y se juran apoyo y lealtad, los pobres continúa cercados, no importa si enfermos o hambrientos, no importa si vivos o muertos.
Para algo han de servir los gobiernos: para acorralar a pobres.
Palabra humana sobre Dios-Amor.
Canto nº 32: Alégrense, Preocúpense. Luis Guitarra
 3ª LECTURA (Relectura del profeta Ezequiel, 36,16-28) (MARISA)
            Me llegó este mensaje del Señor:
De entre todos los pueblos del mundo, de entre todos los países y naciones, razas y religiones,  os convocaré y os reuniré en torno a esta esperanza, la de una tierra sin males, otro mundo posible, una humanidad liberada y hermanada.
Os infundiré un espíritu nuevo, que os convertirá en personas diferentes, libres y felices. Arrancaré vuestros miedos y miserias, vuestros egoísmos y mezquindades. Ablandaré vuestros corazones de piedra, duros para la compasión, insensibles al sufrimiento de los demás, indiferentes ante la injusticia. Y os daré un corazón de carne, tierno y sensible al amor y al desamor, atento a la ternura y al cuidado, lleno de humanidad. Os infundiré mi espíritu, que es de libertad y de amor, de lucidez y valentía, de misericordia y alegría.
Vosotros y vosotras seréis mi pueblo, es más, mi familia, mis hijos e hijas. Y yo seré vuestro Dios, vuestro AMOR-VIDA-PLENITUD, el Amor que da sentido a vuestras vidas. Así seréis felices y haréis felices a quienes seáis capaces de amar.
                                               Palabra humana sobre Dios-Plenitud.
Canto nº 98: Desprender la guerra. Luis Guitarra

4ªLECTURA (Relectura del Evangelio de Mateo ,28,1-10) ( LOLI)

 En la madrugada del sábado, al alborear el primer día de la semana, María Magdalena y las otras mujeres del grupo, que se habían pasado la noche llorando la muerte de Jesús, antes de que saliera el sol, dejaron a los demás Apóstoles y discípulos llorando desconsolados, decepcionados, deprimidos y maldiciendo por todo lo sucedido aquel día.
Ellas, las mujeres, se confabularon, y armándose de valor, dejaron su escondite y salieron con la poca luz del amanecer y fueron a buscar el cuerpo de su amado maestro Jesús. Iban tristes pero a la vez inquietas. Al salir de la ciudad y llegar al descampado, les sorprendió como un gran resplandor y una voz que les dijo:
-Vosotras, mis amigas, no temáis. Ya sé que buscáis a Jesús el crucificado. No está aquí. HA RESUCITADO, tal como os prometió y no creíais posible. Venid a ver el sitio donde yacía e id aprisa a decir a sus discípulos: “Ha resucitado de entre los muertos, y va por delante de vosotros a Galilea. Allí lo veréis”.
Vosotras sois las primeras testigas y apóstolas de esta noticia. A vosotras os encargo ser las primeras transmisoras. Id a decirlo al resto del grupo.
Ellas se marcharon a toda prisa, entre impresionadas y llenas de alegría, y corrieron a anunciarlo a los discípulos.
De pronto, Jesús mismo les salió al encuentro y les dijo:
-Alegraos. Yo también me alegro de estar con vosotras.
Ellas, se acercaron emocionadas, se postraron ante él y le abrazaron los pies como fuera de sí mismas.
Jesús les dijo:
-No tengáis miedo. Id a anunciar a mis hermanos que vayan a Galilea; allí me verán.
María Magdalena y el grupo de mujeres no cabían en sí de gozo y de emoción al sentirse tan afortunadas de ser las primeras en experimentar la resurrección de Jesús a quien tanto habían amado y seguido fielmente, y a quien ya no perderían nunca, pues sabían que vivía en ellas.
                        Palabra humana sobre Dios-Vida.
Canto 21: Resucitó. K. Argüello

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4.    RITUAL DEL AGUA Y DE LA COHERENCIA PERSONAL CON EL DIOS DE LA VIDA
ORACIÓN SOBRE EL AGUA: (RAFA)
“Escucha, Dios, Amor, Vida, Plenitud, las oraciones de esta comunidad reunida en nombre de Jesús, bendice este agua que es fuente de vida y de salud. Esta noche  queremos que sea símbolo de nuestro compromiso con el proyecto de Jesús, para que se avive en nosotros el recuerdo de nuestro bautismo y se renueve el gozo de sentirnos partícipes de la construcción de tu Reino”

RITO DEL AGUA Y DE LA COHERENCIA (PEPE)
Cuando vivimos en coherencia con nuestra fe en los valores de Jesús y compartimos en comunidad nuestra fe  y disfrutamos  los dones de la tierra,  del agua y del sol y amamos y respetamos la vida y la integridad de todos los seres…en lugar de decir “yo no soy digno de que entres en mi casa” damos gracias porque la fe no es sumisión o santo temor, sino confianza y dignidad.
Y ya no nos santiguamos porque no hay ni tres ni uno ni ninguno afuera o arriba del que necesitemos  una señal de cruz. El Dios del Amor es quien nos mueve siempre hacia el amor, hacia los demás,  sean personas, animales, árboles… Ese movimiento, ese impulso a compartir, a simpatizar, a cuidar, a hacernos responsables, a meternos en el agua que guarda en su fondo ese pozo de todo lo que está vivo. Eso es el Amor: un pozo sin fondo en el que poder beber. Y esa agua viva, ese pozo sin fondo, esa fuente inagotable, ese océano  infinito, Eso debe ser Dios. Porque, en el amor que tenemos  a quienes queremos, sentimos a Dios.
Dios es belleza. El derroche de belleza de la Naturaleza -las estrellas del cielo, la forma de las hojas, el vuelo de los pájaros, los colores y sus matices, el mar-, todo ese inconmensurable y siempre sorprendente  listado de hermosuras, todas parecidas, todas diferentes, todas relacionadas, esa belleza que no podemos ni abarcar ni entender, que deslumbra nuestros ojos y nuestra mente, que la ciencia nos descubre y nos explica; todo eso siento que tiene “la firma” de Dios.
Dios es alegría. En la fiesta, en la música y el baile, en las formas indefinibles que adopta la alegría cuando es profunda, en la palabra, en la compañía, en la celebración, en los logros, en el esfuerzo de creatividad, en los cantos, y muy especialmente en las risas y en las sonrisas de la gente,  sentimos que Dios está  más cercano que nunca.
Dios es  también justicia. Es la justicia que la historia no le ha garantizado nunca a la gente buena. La justicia que no alcanzaron a lograr todas las personas, colectivos y pueblos que han vivido y viven aún hoy bajo el yugo de la opresión. Por eso, sentimos hoy como buena noticia de esperanza que la injusticia no tendrá la última palabra.
Momento de compartir nuestra fe:
(Acercándonos al agua y mojándonos las manos)
SI DIOS ES……. Yo estoy en coherencia con Dios si…..

CREDO DE LA COMUNIDAD   (Recitado a coro) 34.
CCP. (S. Ildefonso)
Creemos en el Dios que nos muestra Jesús de Nazaret.
Un Dios misericordioso y solidario al que podemos llamar Padre, Madre, Amor…Un Dios cuyo deseo es la felicidad plena del ser humano. Un Dios que es fuerza amorosa, creadora y creativa...
Principio y motor de todo lo bello y lo buenoUnión amorosa de todo lo que existe. Creemos en Jesús de Nazaret, un judío marginal y heterodoxo que anunció una ética humana basada en el amor y en la justicia; que predicó con su ejemplo el plan de Dios para una humanidad plena y feliz. Creemos que por la radicalidad y coherencia de su vida fue ejecutado por el poder político y religioso de su época. Creemos que en la persona de Jesús de Nazaret Dios se hace humano. Creemos que el seguimiento del mensaje de Jesús es un estilo de vida basado en el amor y la justicia para toda la humanidad. Creemos en el Espíritu de Jesús que nos alienta y empuja en la tarea de construir una humanidad más justa y más feliz.Creemos en la comunidad como espacio para la celebración y la experiencia común de la fe en Jesús resucitado. Por todo ello, creemos en la Resurrección nuestra de cada día y nos sentimos agradecid@s por todo lo que consideramos que la VIDA-DIOS nos da como regalo del AMOR-DIOS QUE SOMOS, para nuestro crecimiento, felicidad y participación en su/nuestra tarea co-creadora y liberadora.
  
5.    LITURGIA EUCARÍSTICA:

OFERTORIO: Pan, vino y dulces. Los compromisos de CCP como colectivo. (DOMINGO ) Invitación a tod@s.
Canto: 43: Yo vengo a ofrecer mi corazón. Fito Páez

PLEGARIA EUCARISTICA DE LA  MEMORIA APASIONADA DE JESÚS:
(CARLOS )
Es una alegría darte gracias, Dios, AMOR, Vida, Plenitud, llen@ de generosidad y solidari@, por todos los bienes que has derramado en las manos de las mujeres y los hombres  a lo largo de toda la historia de la humanidad. Tú nos amabas ya antes de que se formaran las nebulosas y el cosmos.Tú nos tenías presente  antes de la explosión que formó las galaxias y antes del comienzo de la evolución de la que surgió la vida. Desde el comienzo de los tiempos ha estado tu espíritu presente en medio del  devenir  histórico de la especie humana.
En estos tiempos donde ya no podemos agarrarnos a las muletas de las verdades inmutables, sabemos que todo lo que pensamos y decimos de Ti son imágenes y construcciones mentales …y ya no hay caminos obligatorios ni creencias inalterables.
Pero no por eso dejamos de creer en  Jesús de Nazaret. Porque, así como nuestros padres, madres y hermanos son nuestros referentes afectivos, y así como pensamos, hablamos y escribimos en Castellano y esa lengua es nuestro referente cultural, Jesús de Nazaret es nuestro referente religioso y espiritual, nuestro referente ético, el que nos es más familiar para tantear el camino que nos abre al misterio del mundo.
(TERE)
Y por eso lo recordamos. Y su imagen aparece en nuestra “co-razón” no como un hombre religioso sino como una persona en contradicción permanente con los hombres piadosos y sagrados de su tiempo. No propuso doctrinas o creencias sino actitudes. No lo vemos nunca practicando ningún rito sino acercándose a la gente. Le dio la vuelta a varios mandamientos, tal como eran interpretados por la religión de su tiempo. Y no respetó ni los lugares sagrados (oraba en el monte) ni los tiempos sagrados (curaba en sábado).
Jesús fue un hombre espiritual y un maestro ético. Jesús no quiso fundar ninguna religión. Jesús propuso una ética de relaciones humanas. Inspiró un movimiento espiritual y social de hombres y mujeres que buscando a Dios fueran al encuentro de la justicia y construyeran su sueño, el Reinado de Dios-Vida; algo que él concibió como una utopía contrapuesta a la realidad de opresión e injusticia que le tocó vivir en su país y en su tiempo y que le llevó a la tortura y la muerte.
 (PACO)
Este Jesús, nuestro  amigo y maestro, que  fue arrojado a lo más bajo, traicionado, incomprendido, juzgado y condenado como un bandido, siguió amándonos hasta su último aliento; por eso el  Dios del Amor y de la Misericordia, lo levantaste de la muerte. Y por eso ahora, en esta noche, nos sentimos tod@sresucitad@s con El.
Unidos en el gozo que nos producen las alegrías  de la vida en plenitud, recordamos (simbólica y NO sacrificialmente) aquella última cena que compartió Jesús con sus amigos y en la que intuía las consecuencias de sus actitudes y acciones…
Tomando un pan, lo partió y lo dio diciendo:…
(Mª CARMEN)
Nosotr@s que nos sentimos sus  amig@s y nos interesa su propuesta, queremos también participar de la vida, de toda la VIDA, y que nada de ella se pierda…  Pues como dijo Einstein "El misterio es lo más hermoso que nos es dado sentir, el misterio de la eternidad de la Vida, con el presentimiento y la conciencia de la construcción prodigiosa de lo existente".
Por eso hoy, en vez de afirmar “creo que Jesús es Dios” preferimos decir “Queremos creer en Dios como creyó Jesús”.
Y Jesús creyó en el amor, en el misterio de la donación y de la gratuidad, de la esperanza nunca confirmada, y esto anima nuestra fe, que, al igual que la suya, se indigna ante las injusticias y ante el poder que explota y oprime, que toma partido por los de abajo, que no quiere pobres ni ricos, que quiere que a nadie le sobre y a nadie le falte, que apuesta por la equidad y la dignidad de todos, que nos quiere hermanos, y que nos quiere en comunidad.
(ISABEL)
Esta noche, al  reconocer  y aceptar  a Jesucristo en el gesto de partir y repartir el pan, deseamos unir nuestra  plegaria de alegría y gratitud, a la de todos los hombres y mujeres que, movidos por el pálpito del amor se sienten agradecidos por el don de la vida, de la libertad y del compartir.
Recordamos a tod@s quienes nos han precedido  y ahora son para nosotr@s ejemplo y empuje en nuestras vidas. Tenemos presente a todos los pueblos que sufren las consecuencias de la opresión, la violencia y la miseria. Recordamos a todas las personas que se sienten forzadas a abandonar su tierra y su cultura para buscar un futuro mejor; a tod@sl@s que son perseguid@s a causa de sus ideas, tendencia sexual, género, o cualquier otro motivo de discriminación.
( MARISA)
Concédenos el auxilio de Tu Espíritu  y haz crecer en nuestros corazones un amor inmenso por la vida. Llévanos siempre de tu mano y acuérdate de que  todo esto te lo pedimos por medio de Jesús , que vive en medio de nosotr@s y  con el que deseamos  encontrarnos siempre al partir el pan.   Y este es nuestro  ánimo, el espíritu que nos sostiene y por el que sentimos que nada del cosmos, de la vida y del amor quedará perdido.
¡¡¡ Y por eso nos alegramos y nos  felicitamos…!!!   Amén.

6.    PADRE, MADRE, AMOR, VIDA, PLENITUD, NUESTR@ , (con las manos enlazadas. :
 CANTO: AY MADRE (VIDA) QUIEN PUDIERA, bis, VESTIRSE DE ESPERANZA, COMO LA PRIMAVERA…BIS
. (Cada uno podemos leer una frase):
Conciencia Universal  que estas en nosotr@s y en el universo entero.
Santificado sean los nombres con los que cada cual te nombra.
Que fluya  siempre  en nosotr@s  la Vida  tuya que no tiene límites.
Que nuestra voluntad sea siempre coherente con tu voluntad amorosa.
Que ser  conscientes de tu acción en nosotr@os sea el pan nuestro de cada día.
Que aprendamos de Ti a no juzgar, ni condenar y a perdonar siempre.
Que nunca caigamos en la tentación de sentirnos separad@s de Ti.
 Y líbranos de vivir ignorando nuestro verdadero Ser.  Amén.
AY MADRE (VIDA) QUIEN PUDIERA, bis, VESTIRSE DE ESPERANZA, COMO LA PRIMAVERA…BIS

7.    PAZ: Nos repartimos la paz.

8.    COMÚN-UNIÓN: Participamos de la mesa común.
Canto nº 82: La persona es lo primero. Manolo Copé

9.    ACCIÓN DE GRACIAS: Damos gracias por lo que Somos y vivimos
 (MARISA)
Canto nº116: El sol siempre sale. 

 

Jesús había alcanzado la VIDA, antes de morir. Fray Marcos.

Jn 20, 1-9: "Se han llevado al Señor y no sabemos dónde le han puesto..."
Jesús había alcanzado la VIDA antes de morir. Y él fue consciente de ello. Él era el agua viva, dice a la Samaritana, Él había nacido del Espíritu, como pidió a Nicodemo; él vive por el Padre; él es la resurrección y la Vida. Ya en ese momento, cuando habla con sus interlocutores, está en posesión de la verdadera Vida. Eso explica que le traiga sin cuidado lo que pueda pasar con su vida biológica. Lo que verdaderamente le interesa es esa VIDA (con mayúscula) que él alcanzó durante su vida (con minúscula).

No debemos entender la resurrección como la reanimación de un cadáver. Un instante después de la muerte, el cuerpo no es más que estiércol. Los sentimientos que nos unen al ser querido muerto, por muy profundos y humanos que sean, no son más que una relación psicológica. Esos despojos no mantienen ninguna relación con el ser que estuvo vivo. La muerte devuelve al cuerpo al universo de la materia de una manera irreversible. La posibilidad de reanimación es la misma que existe de hacer un ser humano partiendo de un montón de basura. Eso no tiene sentido ni para los hombres ni para Dios.
Jesús sigue vivo, pero de otra manera. Debo descubrir que yo estoy llamado a esa misma Vida. A la Samaritana le dice Jesús: el agua que yo le daré se convertirá en un surtidor que salta hasta la Vida eterna. A Nicodemo le dice: Hay que nacer de nuevo; lo que nace de la carne es carne, lo que nace del espíritu es Espíritu. El Padre vive y yo vivo por el Padre, del mismo modo el que me asimile, vivirá por mí. Yo soy la resurrección y la Vida, el que cree en mí aunque haya muerto vivirá, y todo el que vive y cree en mí no morirá para siempre. Jesús no habla para un más allá, sino en presente. ¿Creemos esto?
Jesús había conseguido, como hombre, la plenitud de Vida del mismo Dios. Porque había muerto a todo lo terreno, a su egoísmo, y se había entregado por entero a los demás, llega a la más alta cota de ser posible como hombre mortal. Este admirable logro fue posible, después de haber descubierto que esa era la meta de todo ser humano, que ese era el único camino para llegar a hacer presente lo divino. Esta toma de conciencia fue posible, porque había experimentado a Dios como Don. Una vez que se llega a la meta, es inútil seguir preocupándose del vehículo que hemos utilizado para alcanzarla.

La liturgia de Pascua no está diciéndonos que en cada uno de nosotros, hay zonas muertas que tenemos que resucitar. Nos está diciendo que debemos preocuparnos por la vida biológica, pero no hasta tal punto que olvidemos la verdadera Vida. Nos está diciendo que tenemos que estar muriendo todos los días y al mismo tiempo resucitando, es decir pasando de la muerte a la Vida. Si al celebrar la resurrección de Jesús no experimentamos en nosotros una nueva Vida, es que nuestra celebración ha sido simple folclore.

Meditación: 
Yo soy la resurrección y la Vida.
Resurrección y Vida expresan la misma realidad, no son cosas distintas.
En la medida en que haga mía la Vida,
estoy garantizando la resurrección.

No te preocupes de lo que va a ser de ti en el más allá.
Además de ser inútil, te llevará a una total desazón.
Lo importante es vivir aquí y ahora esa nueva VIDA.
Todo lo demás ni está en tus manos ni debe importarte.

 Fray Marcos