1. Introducción:
Nosotr@s hoy no celebramos la muerte de Jesús, celebramos su Vida. Queremos
mantener vivo su recuerdo, que “nada de
su vida se pierda”. Este esfuerzo realizado durante siglos y siglos de
cristianismo hace que hoy Jesús realmente “viva” entre nosotros. Él es nuestro
referente ético, junto a otras muchas personas, que hicieron un nuevo mundo
posible,
Todos los inviernos se apaga la vida, pero la vida espera, empujando, en cada nueva
primavera, en cada pascua, igual que esperan nuestras ilusiones y
proyectos.
Por eso podemos celebrar los pasos, cada paso, todos los pasos. Los que llevan al éxito y los que se pierden en la inconsciencia o el fracaso... recordando también la cena clandestina de Jesús y su paso por el fracaso. Celebrando el paso de la muerte a la vida, anhelamos una resurrección moral en la humanidad.
2. RITO DE LA LUZ: (En el salón, cogemos una velita que estarán en una bandeja y la encendemos)
ORACIÓN SOBRE EL FUEGO
“Oh
VIDA, fuente de toda luz y de toda alegría, con Jesús, nos has dado el fuego de
la Luz, para que lleguemos a ser luz del mundo. Esta comunidad se congrega hoy
en torno a este fuego para celebrar la fiesta de la resurrección de la Vida y
de la Libertad. Gracias por Jesús, amigo y hermano. Amén. “
Se enciende el Cirio pascual.
Canto nº 2:
Somos Luz. (Macaco)
PREGÓN PASCUAL. (Miguel Ángel Mesa)
Cuando contemplo la noche y no me cierro a su oscuridad más densa, sino que mi retina estalla de admiración en miles de estrellas fugaces… es tiempo de Resurrección.
Si mi actitud vital busca pacificar tensiones, renovar ilusiones, tejer lazos de acuerdo, liberar los corazones del odio… es tiempo de Resurrección
Cuando abrazo a alguien que llora desconsolada, cuando mis manos cierran las heridas causadas por los zarpazos de la vida… es tiempo de Resurrección
Cuando siento a todas como herman@s, como ciudadan@s de un mismo mundo, si les acojo y no les margino por su piel…es tiempo de Resurrección
Si llevo una vida sencilla, sin dejarme consumir por el consumo, y comienzo a ser… es tiempo de Resurrección
Cuando el silencio penetra en la calma de mi alma, me llena de paz y me conduce al encuentro en soledad con mi buen dios de la Vida… es tiempo de Resurrección
Si mi existencia la empleo en una entrega sincera hacia los empobrecidos y marginados, si mi felicidad es la suya, y son asiduos en mi casa, en mi mesa… es tiempo de Resurrección.
Cuando comprenda que mi fe no tiene sentido sin creer en la Vida, en la Esperanza de unos nuevos cielos, de una nueva tierra y comprometa para ello mi vida… será el tiempo de mi Resurrección.
"EL MIEDO SALIÓ DE SU FOSA Y HOY AMAR ES COSA DE VALIENTES"
Canto nº 117 (papeles sueltos): La guerrilla de la concordia. (J. Drexler)
https://www.youtube.com/watch?v=Vy8v-oxtK1E
3. LITURGIA DE LA PALABRA HUMANA SOBRE LOS VALORES DE JESÚS:
- 1ª
LECTURA: «El nuevo génesis»
«Y Dios vio que todas las naciones de la Tierra, negras y blancas, pobres y
ricas, del Norte y del Sur, del Oriente y del Occidente, de todos los credos,
enviaban sus emisarios a un gran edificio de cristal a orillas del río del Sol
Naciente, en la isla de Manhattan, para estudiar juntos, pensar juntos y
juntos cuidar del mundo y de todos sus pueblos.
Dios dijo: «Eso es bueno».
Y ése fue el primer día de la Nueva Era de la Tierra.
Y Dios vio que los soldados de la paz separaban a los combatientes de las naciones
en guerra, que las diferencias se resolvían mediante la negociación y el
raciocinio y no por las armas, y que los líderes de las naciones se
encontraban, intercambiaban ideas y unían sus corazones, sus mentes, sus almas
y sus fuerzas para el beneficio de toda la humanidad.
Y Dios dijo: «Eso es bueno».
Y ése fue el segundo día del Planeta de la Paz.
Y Dios vio que los seres humanos amaban a la totalidad de la Creación,
las estrellas y el sol, el día y la noche, el aire y los océanos, la tierra y
las aguas, los peces y las aves, las flores y las plantas y a todos sus
hermanos y hermanas humanos.
Y Dios dijo: «Eso es bueno».
Y ése fue el tercer día del Planeta de la Felicidad.
Y Dios vio que los seres humanos eliminaban el hambre, la enfermedad, la
ignorancia y el sufrimiento en toda la Tierra proporcionando a cada persona
humana una vida decente consciente y feliz, controlando la avidez, la fuerza y
la riqueza de unos pocos.
Y Dios dijo: «Eso es bueno».
Y ése fue el cuarto día del Planeta de la Justicia.
Y Dios vio que los seres humanos vivían en armonía con
su planeta y en paz con los demás, gestionando sus recursos con sabiduría,
evitando el despilfarro, frenando los excesos, sustituyendo el odio por el
amor, la avaricia por el darse por satisfecho, la arrogancia por la humildad,
la división por la cooperación, y la suspicacia por la comprensión.
Y Dios dijo: «Eso es bueno».
Y ése fue el quinto día del Planeta de Oro.
Y Dios vio que las naciones destruían sus armas, sus bombas, sus
misiles, sus barcos y aviones de guerra, desactivando sus bases y
desmovilizando sus ejércitos, manteniendo sólo una policía de la paz.
Y Dios dijo: «Eso es bueno».
Y ése fue el sexto día del Planeta de la Razón.
Y Dios vio que los seres humanos recuperaban la Vida y a la persona
humana como su Alfa y Omega, reduciendo a las instituciones, creencias,
políticas, gobiernos y demás entidades humanas a su papel de simples servidores
del Amor y de los pueblos. Y Dios los vio adoptar como la ley suprema
aquella que dice: «Amarás al Dios de la Vida y el Amor, del universo con todo
tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Amarás
a tu bello y maravilloso planeta y lo tratarás con infinito cuidado. Amarás a
tus hermanos y hermanas humanos, como te amas a ti mismo. No hay mandamientos
mayores que estos».
Y Dios dijo: «Eso es bueno».
Y ése fue el séptimo día del Planeta de Dios». (Robert Muller. Asist. ONU)
CANTO 80: FLOR DE JARA. (Luis Pastor)
- 2ª Lectura: SOY (Luis García Montero)
Soy la
madre viuda que necesita huir de una guerra interminable, emprende el
camino, recorre kilómetros y se sube en una patera con su hijo en brazos.
Soy el frío y la incertidumbre que cruza el mar y canta en silencio una
esperanza, entre los ruidos del motor y de las olas, una imaginación que repite
la palabra orilla, mi orilla.
Soy el niño desorientado que se subió con su madre en una patera, y llegó solo a
la orilla, una orilla que ya no es mía, porque mi madre cayó al agua en medio
de la navegación.
Soy la mujer que ha sido violada mientras hacía su camino hacia
el mar y ahora mira las estrellas de la noche y duda si estará embarazada y
tendrá que adaptarse a la nueva tierra, al nuevo país, a la nueva vida, con un
hijo no deseado en los brazos.
Soy
también el joven que no quiere perpetuar su existencia en la pobreza
extrema, cansado de ver en las pantallas de los teléfonos y los televisores
ciudades donde la gente celebra la abundancia, un argumento feliz que ocupa los
ojos y oculta otras realidades, por ejemplo, los mendigos sin techo que se
tapan con una manta la cabeza para huir del alumbrado avasallador, las luces
artificiales que impiden ver las estrellas en los cielos nocturnos.
Soy el padre y la madre que no pueden viajar, pero sueñan con una
vida mejor para su hijo, y se acercan a un cayuco y compran un hueco y confían
en un amigo para que lo cuide hasta que las autoridades de un país extranjero
se hagan cargo de él.
Soy
uno de los miles de cadáveres que tiemblan sobre el agua en la fosa común
del Mediterráneo, cuerpos que serán devorados por los peces o por el hambre
insaciable de las estadísticas. No soy nada de eso, pero soy todo eso para
saber quién soy.
Soy
el ciudadano indiferente que discute sobre amnistías, banderas,
subidas de precios, árbitros de fútbol y vacaciones de verano, pero no tiene
tiempo de pensar en la miseria y los naufragios, una ruleta de la vida y la
muerte, ni siquiera cuando abre las ventanas de su apartamento frente al
mar.
Soy
el negociante que gana dinero con la venta de armas y
necesita alimentar el consumo de nuestras municiones sobre la carne de cañón
del África Subsahariana.
Soy
el periodista que necesita hacer titulares falsos sobre los
peligros de los inmigrantes, su alta delincuencia, sus ganas de quitarle a los
demás los puestos de trabajo.
Soy
el empresario que contrata emigrantes para trabajar, pero prefiere
que sean ilegales y no tengan derechos, porque así los salarios son más bajos y
se evitan las protestas laborales.
Soy
el católico que olvida el amor al prójimo,
el mandato de amarse los unos a los otros, porque tener una identidad orgullosa
de patria significa odiar al extranjero, despreciar los mundos que puedan
contaminar la unidad de destinos en lo universal de nuestros bolsillos y
nuestros himnos.
Soy
el demócrata que habla de progreso y de justicia y de
derechos humanos, pero se acostumbra a convivir con los colmillos de las
fronteras, bien por desinterés en la otra orilla, bien por miedo a las
dentaduras que ya están dentro y necesitan morder.
Soy
uno de los miles de muertos vivientes que caminan por las calles,
acuden a su trabajo y protagonizan anónimas rutinas semanales sin conmoverse
ante las noticias de los naufragios, las madres sin hijos, las hijas sin padre,
los cuerpos que no tienen nombre.
Soy
un demócrata que no se desespera cuando sus gobernantes
demócratas deciden endurecer las leyes de migración y aumentar las dimensiones
marinas de la fosa común. Del todo, del todo, tampoco soy todo eso, pero soy
todo eso para saber quién soy. (Luis García Montero. Infolibre
7/10/2023)
CANTO: YO TE NOMBRO. 93 ( Eluard-Pagliano)
3ª
LECTURA (Relectura del profeta Ezequiel, 36,16-28)
Me
llegó este mensaje del Señor:
De entre todos los pueblos del mundo, de entre
todos los países y naciones, razas y religiones, os convocaré y os reuniré en
torno a esta esperanza, la de una tierra sin males, otro mundo posible, una
humanidad liberada y hermanada.
Os infundiré un espíritu nuevo, que os
convertirá en personas diferentes, libres y felices. Arrancaré vuestros miedos
y miserias, vuestros egoísmos y mezquindades. Ablandaré vuestros corazones de
piedra, duros para la compasión, insensibles al sufrimiento de los demás,
indiferentes ante la injusticia. Y os daré un corazón de carne, tierno y
sensible al amor y al desamor, atento a la ternura y al cuidado, lleno de
humanidad. Os infundiré mi espíritu, que es de libertad y de amor, de lucidez y
valentía, de misericordia y alegría.
Vosotros y vosotras seréis mi pueblo, es más,
mi familia, mis hijos e hijas. Y yo seré vuestro Dios, vuestro
AMOR-VIDA-PLENITUD, el Amor que da sentido a vuestras vidas. Así seréis felices
y haréis felices a quienes seáis capaces de amar.
Canto nº
98: Desprender la guerra. (Luis Guitarra)
4ªLECTURA
(Relectura del Evangelio de Mateo ,28,1-10)
En
la madrugada del sábado, al alborear el primer día de la semana, María
Magdalena y las otras mujeres del grupo, que se habían pasado la noche llorando
la muerte de Jesús, antes de que saliera el sol, dejaron a los demás Apóstoles
y discípulos llorando desconsolados, decepcionados, deprimidos y maldiciendo
por todo lo sucedido aquel día.
Ellas, las mujeres, se confabularon, y
armándose de valor, dejaron su escondite y salieron con la poca luz del
amanecer y fueron a buscar el cuerpo de su amado maestro Jesús. Iban tristes
pero a la vez inquietas. Al salir de la ciudad y llegar al descampado, les
sorprendió como un gran resplandor y una voz que les dijo:
-Vosotras, mis amigas, no temáis. Ya sé que
buscáis a Jesús el crucificado. No está aquí. HA RESUCITADO, tal como os
prometió y no creíais posible. Venid a ver el sitio donde yacía e id aprisa a
decir a sus discípulos: “Ha resucitado de entre los muertos, y va por delante
de vosotros a Galilea. Allí lo veréis”.
Vosotras sois las primeras testigas y apóstolas
de esta noticia. A vosotras os encargo ser las primeras transmisoras. Id a
decirlo al resto del grupo.
Ellas se marcharon a toda prisa, entre
impresionadas y llenas de alegría, y corrieron a anunciarlo a los discípulos.
De pronto, Jesús mismo les salió al encuentro y
les dijo:
-Alegraos. Yo también me alegro de estar con
vosotras.
Ellas, se acercaron emocionadas, se postraron
ante él y le abrazaron los pies como fuera de sí mismas.
Jesús les dijo:
-No tengáis miedo. Id a anunciar a mis hermanos
que vayan a Galilea; allí me verán.
María Magdalena y el grupo de mujeres no cabían
en sí de gozo y de emoción al sentirse tan afortunadas de ser las primeras en
experimentar la resurrección de Jesús a quien tanto habían amado y seguido
fielmente, y a quien ya no perderían nunca, pues sabían que vivía en ellas.
Canto 21:
Resucitó. (Kiko Argüello)
COMENTARIOS
DE TOD@S.….
Canto: Solo el AMOR. (Silvio Rodríguez) (final papeles sueltos) Por los cantamañanas.
Solo el amor Alumbra lo que perdura. Solo el amor Convierte en milagro el barro. Solo el amor Engendra la maravilla. Solo el amor Consigue encender lo muerto...
https://www.youtube.com/watch?v=vFprnO89Mfk
4. RITUAL DEL AGUA. Mojándonos por ese Otro Mundo Posible.
OFERTORIO: Pan, vino y dulces y…
Damos GRACIAS por este agua que es fuente de Vida
y de Salud. Esta noche, queremos que sea símbolo de nuestro compromiso con el proyecto de Jesús, para que se avive en
nosotros el recuerdo de nuestro bautismo, como adhesión al proyecto de Jesús y
se renueve el gozo de sentirnos partícipes de la construcción ese Otro mundo
posible, que perseguimos.
(Vamos saliendo, expresando nuestros compromisos, personales y comunitarios, deseos, proyectos, gratitudes, ruegos, etc, mojándonos por ese otro mundo posible)
Credo 1.
RENACER, (José Arregi)
Creo que vivir es darse y que darse es la mejor forma de recibirse y de ser.
Que morir es vaciarse o darse del todo y que vaciarse y darse del todo es el paso para ser plenamente.
Que aprendemos a vivir aprendiendo a morir un poco cada día como mejor podamos, y que aprendemos a morir aprendiendo a vivir cada día lo mejor que podamos, en bondad desprendida y feliz.
Que ahí se realiza en nosotros el Misterio de la Vida o de Dios, que es Pascua, incesante Pasar, inagotable Darse y Recibirse y eterno Renacer.
Que no hay otro fin del mundo que la codicia y la opresión universal.
Que no hay otro criterio de juicio que el amor de cada
día.
Que no hay otra condenación ni infierno que el que nos procuramos en esta vida a nosotros mismos y a los demás cuando nos encerramos en nuestro ego y nos hacemos la guerra.
Que no hay otro cielo que la bienaventuranza compartida en la comunión de los vivientes, la Vida Buena común, y que ése es el cielo posible de esta nuestra Tierra común, el cielo al que aspiramos y del que somos responsables.
. CREDO 2. (José Luis Sampedro) Tod@s.
Creo en la Vida, Madre todopoderosa, creadora de los Cielos y la Tierra.
Creo en la Humanidad, su avanzada Hija, concebida en ardiente evolución, progresando a pesar de l@s Pilatos e inventores de dogmas represores, para oprimir la Vida y sepultarla. Pero la Vida siempre resucita, y la humanidad sigue en marcha hasta el mañana.
Creo en los horizontes del Espíritu, que es la Energía cósmica del mundo. Creo en la Humanidad, siempre ascendente. Creo en la Vida perdurable.
Y Amen (sin acento).
Canto: 43: Yo vengo a ofrecer mi corazón. (Fito Páez)
5. A modo de Plegaria:
Poema: “Insurrección” (Deme Orte)
Hubo resurrección porque antes hubo insurrección. Un judío marginal, un galileo pobre y subversivo que violaba los códigos de pureza, se juntaba con gente de mal vivir y encaraba la hipocresía de los buenos.
Profeta de liberación, rompía las cadenas de la opresión y daba felicidad desde la pobreza. Cuestionó el Templo y el Imperio, renegó del dios Dinero y apostó por una nueva sociedad de hombres y mujeres iguales y hermanos.
Vivió la vida intensamente, dio vida, prometió Vida. Combatió el sufrimiento y la muerte. Los poderes de la muerte -el Templo, el Imperio, el Dinero-se conjuraron contra él y le dieron muerte. Muerte de esclavo, de maldito, tortura previa, fuera de la ciudad, traicionado y abandonado, por blasfemo, subversivo, insurrecto y soñador.
Donde dos o tres se juntan hay una célula subversiva. Donde hay una mujer y un hombre nuevos hay un mundo nuevo. Donde hay Comunidad hay insurrección. Donde hay nueva insurrección, hay nueva resurrección. Donde hay insurrección colectiva, hay resurrección colectiva. Y llegará la insurrección total y la resurrección total.
Canto nº196 Padre/Madre nuestr@ (CCP San Ildefonso. Papeles sueltos)
Brindis por OTRO MUNDO POSIBLE. (Tod@s)
El Dios invisible del Amor y de la Vida, se hizo visible en Jesús y nos
mostró su amor incondicional en su entrega total que recordamos y
celebramos.
Reunidos con su gente, tomo pan, lo partió, lo compartió y repartió diciendo:
Tomad, comed. En este pan me doy a vosotros para daros vida. Haceos también
pan, y tomando la copa, la ofreció brindando: tomad, bebed como una vida
compartida a la salud de todos y todas. Que mi memoria os acompañe
siempre.
Esta comunión con Jesús nos hace también comunidad de hermanos y
hermanas. Pequeñas comunidades enviadas a proclamar la hermandad universal de
su Reinado y a ser signos suyos haciendo comunidad a nuestro lado.
La solidaridad con toda la familia humana y con toda la
creación sea expresión del amor inclusivo y liberador que quien es Amor y
Comunidad.
Por esa comunión brindamos, en memoria de Jesús y por la esperanza de ese
Otro mundo posible. ¡SALUD¡¡
(Brindamos con el vino y dulces, nos damos la Paz)
6. ACCIÓN DE GRACIAS: Damos gracias por lo que Somos y vivimos
Canto nº 77: Vele, vele (Carlos Cano) Canto: El Derecho de Vivir en Paz. (Víctor Jara). (final papeles sueltos) Canto: El sol siempre sale.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario más arriba, donde dice "Introduce tu comentario". Gracias.