Es
manifiesto que la ultra derecha española, tras sus últimas
declaraciones: “Debe haber deportaciones masivas de inmigrantes y que 8
millones de ellos deben volver a su país con su hijos porque no se adaptan a
nuestras costumbres y son un peligro para nuestra seguridad”, se alinea con la
corriente Trumpista, que ya ha comenzado en su pais con redadas masivas de
inmigrantes.
Es evidente que es una medida imposible de llevar a cabo, porque son los inmigrantes los que en gran parte sostienen nuestra economía, trabajando en sectores que los españoles no quieren: la agricultura, cuidado de mayores, restauración, construcción, transporte etc. ¿Qué pasaría si ellos no estuvieran haciendo esos trabajos?
La
ultraderecha es xenófoba, contraria a la diversidad. Rechaza a las personas
pobres, migrantes, lgtbiq+, además rechaza el cambio climático….Y cada vez
más, su grado de odio al diferente va en aumento.
Por
otro lado, también exige a la Diócesis de Almería que dé marcha atrás en su muy
interesante proyecto de dedicar su cerrado Seminario a acoger y apoyar personas
migrantes, promovido por el Servicio Jesuita a inmigrantes que ha tenido
el apoyo del obispado de la diócesis y que tiene previsto comenzar en
septiembre. Deseamos y confiamos que la Diócesis de Almería no haga caso a
estas exigencias y siga adelante con su interesante proyecto.
Nos
preguntamos: ¿pueden SER CRISTIANAS estas personas que siguen y están de
acuerdo con estas políticas xenófobas? Creemos que los obispos españoles deben
asumir una actitud de valentía profética manifestando públicamente, que
estas personas no pueden ser cristianas, por mucho que presuman de serlo.
También
Trump se aferra al crucifijo y a la Biblia en sus campañas electorales y
declaraciones públicas, mientras colabora de modo decisivo con Netanyahu en el
exterminio y genocidio de los palestinos en Gaza . Estas personas y dirigentes
políticos deben ser puestos en evidencia y denunciados como anticristianos por
quienes deben de hacerlo: el Papa y los obispos fundamentalmente, pero también
por todas las comunidades y grupos cristianos.
Nosotros,
como cristianos de base lo denunciamos. No podemos quedar callados ante esta
avalancha de xenofobia, que siembra el odio y el desprecio hacia nuestro
prójimo, nuestros hermanos y hermanas migrantes. Jesús en su evangelio lo tiene
muy claro: acogida con todas las personas, especialmente con los más
vulnerables. Francisco profundiza mucho sobre la inmigración en su encíclica
Fratelli Tutti: “nadie debe ser extranjero en la casa común”.
Comunidades Cristianas Populares de Andalucía. 9 de Julio de 2025
COMUNICADO DE REDES CRISTIANAS: POR LA VERDAD, LA DIGNIDAD Y LA CONVIVENCIA
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